Podemos definir un Sistema de Extinción de Incendios por Rociadores Automáticos, como una combinación de tuberías subterráneas y elevadas que se conecta con un abastecimiento automático de agua y está instalado en la totalidad del edificio, todo esto de acuerdo a las normas de ingeniería en protección contra incendios. Este sistema tiene como culminación una serie de rociadores adheridos a la tubería elevada bajo un patrón sistemático y es normalmente activado por calor.
Un rociador es un dispositivo termosensible que está diseñado para reaccionar a temperaturas predeterminadas, descargando automáticamente cierta cantidad de agua que se distribuye sobre lo protegido y el área del piso para de esta forma controlar o suprimir un incendio. Los rociadores son el elemento más eficaz hasta la fecha para el control de incendios.
Los sistemas de rociadores automáticos están diseñados para funcionar durante las primeras etapas de desarrollo de un incendio y minimizar su impacto total en el edificio; además contrario al mito urbano y las películas donde todos los rociadores en una residencia o edificio son activados simultáneamente en un incendio, solo aquellos que se encuentran próximos a este son realmente activados, teniendo un daño por agua menor que en un incendio sin este sistema de protección.
Importancia y Beneficios de los Sistemas de Rociadores
Un sistema de rociadores debidamente diseñado, instalado y mantenido es un elemento de gran importancia durante las etapas de diseño y construcción en construcciones modernas. Un buen entendimiento por lo que los rociadores pueden realmente realizar por quienes diseñan, instalan y aprueban dichos sistemas es trascendental para la efectividad total del sistema.
El beneficio para la seguridad humana es intuitivo, ya que al suprimirse o controlarse el fuego se disminuye el riesgo para los ocupantes causado por la radiación, productos de la combustión como vapores calientes y demás fenómenos que ocurren en el desarrollo del incendio; además estos sistemas hacen sonar una alarma que alerta a los ocupantes del edificio sobre una condición de incendio.
La protección de las mercancias, equipos y bienes de una empresa u organización generadas por el sistema de rociadores mediante el control del incendio, evitan pérdidas que puedan afectar la capacidad de continuar realizando su actividad económica o la destrucción de un negocio.
Los actuales códigos de construcción requieren la presencia de rociadores en gran variedad de instalaciones, lo que a su vez puede ayudar a reducir la prima de incendio cobrada por la aseguradora frente al evidente beneficio de estos sistemas.
El diseño de un sistema de rociadores automáticos realizado de acuerdo a las normas NFPA, particularmente la NFPA 13 Standard for the Installation of Sprinkler Systems. Norma para la Instalación de Sistemas de Rociadores, seguido de una adecuada instalación, prueba y mantenimiento, mejorarán notoriamente la seguridad de las personas y la protección de sus bienes, sin embargo un Plan de Protección Contra Incendios debe continuar considerando la instalación de extintores portátiles, capacitación del personal, procedimientos de trabajo seguros y la interacción con el Cuerpo de Bomberos de la jurisdicción, entre otros.